Tratar y trabajar con las flores dulcifica el alma y abre tu corazón a la comprensión, el diálogo, el perdón y la solidaridad. Estar rodeado de flores nos hace mejores personas...nos llena de paz, de serenidad, de belleza interior. Quien ha llegado hasta el corazón de una flor, cambia toda su vida...No se puede vivir en este mundo lleno de armonía y belleza y guardar en tu corazón rencor y maldad...es imposible.
3 de febrero de 2013
La melancolía de los domingos...
Estas fotografías las tomamos cuando nos trasladamos a nuestro actual Atelier en la Calle Mefisto. La luz y el viento que sale desde nuestra terraza eran profecía de los tiempos que vendrían después. Ahora sabemos más, estamos mayor equipo, nuestra formación florística es más sofisticada...pero no queremos perder la inociencia y las ilusiones del comienzo, ni las ganas de trabajar ni las ganas de agradar y hacer que todo el mundo se sienta féliz en nuestra casa...esto solamente pasa en la melancolía de los domingos...
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