Tratar y trabajar con las flores dulcifica el alma y abre tu corazón a la comprensión, el diálogo, el perdón y la solidaridad. Estar rodeado de flores nos hace mejores personas...nos llena de paz, de serenidad, de belleza interior. Quien ha llegado hasta el corazón de una flor, cambia toda su vida...No se puede vivir en este mundo lleno de armonía y belleza y guardar en tu corazón rencor y maldad...es imposible.
29 de diciembre de 2013
Contemplar...
Cuando tenemos que realizar cualquier trabajo floral, desde el más sencillo hasta el más complicado, siempre tenemos dentro del corazón una conviccion...la belleza de nuestros trabajos existirá en realidad si llega al corazón de las personas que lo contemplan: he ahí nuestro compromiso constante en mejorar y en seguir despertando emociones, sentimientos, sensaciones...